La idea de la dolarización como consecuencia del deterioro de las instituciones

09.01.2024

La inseguridad jurídica presenta un desafío significativo para la implementación de reformas estructurales. En un entorno donde las reglas y normativas son inciertas o sujetas a cambios abruptos, los inversionistas y actores económicos pueden mostrar reticencia y temor a comprometerse. Esto hace poco creíble la aplicación de políticas monetarias y de otro tipo que dónde subyace la soberanía monetaria si lo que tiene fuerza de ley en una administración puede ser borrado con el codo por la siguiente. Esta falta de estabilidad legal desalienta la inversión y obstaculiza el progreso de las reformas. Los participantes en la economía buscan predictibilidad y un marco normativo claro para planificar y tomar decisiones a largo plazo.Un claro ejemplo es el planteo de la elección entre dolarización y soberanía monetaria que en una economía afectada puede ser compleja. La dolarización podría proporcionar estabilidad y combatir la inflación, pero a expensas de perder control sobre la política monetaria. Por otro lado, mantener la soberanía monetaria ofrece flexibilidad, pero puede resultar difícil controlar la inflación. La decisión de un formato u otro dependerá de la gravedad de la situación económica y las medidas estructurales necesarias. En el ejemplo de la dolarización puede ser un paso drástico pero efectivo en contextos de crisis extrema, mientras que preservar la soberanía monetaria implica abordar las causas subyacentes de la enfermedad económica.

Es por ello, que al buscar un ancla en las políticas monetarias el país se encuentra en la disyuntiva de mantener su soberanía monetaria o anclarse a un parámetro objetivo dónde el político de turno no pueda cambiar las reglas a conveniencia propia. No podemos negar que fue el modus operandi de los gobiernos argentinos sea cual fuere su ideología, representatividad o legitimidad democrática desde que tenemos memoria. Negar esto es, a mi criterio, tratar de confirmar una visión ideológica sesgada de la realidad. El ideal de encontrar un equilibrio que combine medidas inmediatas para estabilizar la economía con reformas estructurales a largo plazo podría ser la estrategia más efectiva para una economía enferma pero no aplicable en un entorno de desconfianza institucional.

Para abordar este problema, es esencial fortalecer el sistema legal y proporcionar garantías de estabilidad en las leyes y regulaciones. Mejorar la transparencia, reducir la corrupción y fortalecer el Estado de derecho son pasos fundamentales para crear un ambiente propicio para las reformas estructurales. La mejora del respeto institucional y la fortaleza legal de un país generalmente implica un enfoque integral. Esto podría incluir reformas legales incluyendo una reforma constitucional sensata a favor del bienestar del ciudadano (y no para aventajar al poder en todas sus formas como la reforma espantosa de 1994), el fortalecimiento de instituciones, educación cívica y promoción de la transparencia. Consultar a expertos y fomentar el diálogo nacional también son pasos importantes para abordar estos problemas.

El desafío de implementar reformas estructurales en un país donde la falta de respeto hacia las instituciones es moneda común, es considerable. Las reformas requieren una base de instituciones sólidas para su éxito y la falta de respeto institucional lleva inexorablemente a la resistencia, a la corrupción o incluso al fracaso de las reformas. La confianza en las instituciones es esencial para que las reformas sean aceptadas y efectivas tanto interna como externamente. Cuando estas instituciones carecen de credibilidad, la población puede mostrar resistencia y desconfianza, obstaculizando el proceso de cambio.

Para concluir, la inseguridad jurídica puede minar los esfuerzos de reforma, por lo que es crucial establecer un marco legal estable y confiable para promover el crecimiento económico y el éxito de las reformas estructurales. Es crucial abordar la mejora de las instituciones junto con las reformas, fortaleciendo la transparencia, el Estado de derecho y la rendición de cuentas. Además, involucrar a la sociedad civil y buscar un consenso amplio puede ayudar a superar las barreras asociadas con la falta de respeto hacia las instituciones. La reforma estructural en un entorno sin respeto hacia las instituciones requiere un enfoque integral que aborde tanto los aspectos económicos como los desafíos institucionales para lograr resultados sostenibles.

Por Pablo Gabriel Miraglia